“Sigo con preocupación las noticias que llegan de Lampedusa, donde se cuentan otros muertos entre los inmigrantes a causa del frío durante la travesía en el Mediterráneo”, dijo el Papa al terminar la audiencia general celebrada en la plaza de San Pedro. Francisco afirmó que dedica sus oraciones a las víctimas y después realizó una llamamiento para “animar nuevamente a la solidaridad para que a nadie le falte el necesario auxilio”.
El Papa se refería a los 29 inmigrantes que fallecieron por el frío el pasado lunes mientras intentaban llegar a las costas italianas. Esta mañana se tuvo noticia de que al menos otros 200 inmigrantes han muerto mientras atravesaban el Canal de Sicilia, según el testimonio de varios rescatados que viajaban con ellos y que recogió una portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (UNHCR).