La corte rechazó por segunda vez la apelación de la sentencia que se falló en julio de 2017 por lo que, según la ley egipcia, la condena pasa a ser definitiva.
Asimismo, según la agencia, otros 80 islamistas han sido condenados a cadena perpetua, que equivale en Egipto a 25 años, así como a 34 individuos a 15 años y un menor de edad a diez años.
Fueron hallados culpables del ataque a la comisaria de Kerdasa como represalia por el desalojo violento de los campamentos islamistas de Rabaa al Adaweya y Al Nahda en El Cairo, organizados en apoyo al expresidente Mohamed Mursi, derrocado en julio de 2013 en un golpe de Estado militar.
Kerdasa, considerada un feudo histórico de islamistas, estuvo tomada durante un mes por grupos radicales hasta que las fuerzas de seguridad lanzaron una operación para recuperar su control en septiembre de 2013.
Cientos de personas han sido condenadas a pena de muerte en Egipto desde el derrocamiento de Mursi, que también está arrestado y condenado a cárcel, así como la mayoría de los dirigentes del grupo islamista Hermanos Musulmanes, al que pertenece el expresidente.