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“Parece una interminable pesadilla”, definieron activistas a favor de los derechos de los indocumentados en ese país al breve período inicial desde que Trump asumió el 20 de enero último,tras ganar las elecciones de noviembre pasado.
Sin embargo, destacaron como un asunto positivo, en declaraciones recogidas por la agencia mexicana Notimex, que Trump “ha traído unidad entre organizaciones latinas y otras minorías”.
En “sus primeros 100 días”, Trump no sólo ha sido piedra de escándalo, sino “factor de unidad en la comunidad inmigrante” y vaticinó que “ésta crecerá en respuesta sólida y de resistencia”, dijo José Juan Gutiérrez, de la Coalición por los Derechos Plenos.
“Estos 100 días serán el alumbramiento no solo para la unidad social en contra del racismo y la discriminación, sino que serán el factor que impulse y atraiga la anhelada reforma migratoria amplia, integral y humana”, anticipó con optimismo.
El activista se mostró satisfecho por la “creciente y gran unidad de coaliciones” que han respondido a las medidas agresivas de Trump y estimó que ese “es solo un aviso y un adelanto de lo que está por venir y es la unificación no solo de inmigrantes sino de más sectores de Estados Unidos”.
Aunque no se han hecho realidad sus amenazas de deportaciones masivas, ha expulsado a un tercio más de indocumentados (21.362) del 20 de enero al 13 de marzo pasado, respecto al mismo período del 2016, según cifras del gobierno estadounidense.
Obama echó de Estados Unidos a 2,7 millones de personas durante los ocho años de sus dos períodos de gobierno, pero Trump promete superar esa marca.
Angélica Salas, de la Coalición por los Derechos Humanos de Inmigrantes, de origen mexicano, señaló que los primeros 100días de Trump “representan el secuestro más significativo del gobierno estadounidense”, y “ están tristemente estropeados por la torpeza moral a diferencia de todo lo que hemos visto antes”.
“Su escasa ocupación se ha visto afectada por la Constitución, el orgullo por el desdén, la incitación a dividir y conquistar”, afirmó.
Trump ha usado su cargo “para dividir a Estados Unidos en inmigrantes y no inmigrantes”, afirmó el activista, quien dijo tener la esperanza de que “cambie de rumbo”.
“De no hacerlo amenaza la seguridad de la patria, daña al pueblo en temas clave como la atención de la salud, libertad religiosa, mujeres, inmigración y medio ambiente”, sostuvo.
La dirigente estimó que “con su maquinaria de deportación” Trump “tiene atemorizada a la comunidad inmigrante, pero ésta ha estado respondiendo de forma valiente y lo seguirá haciendo durante toda la administración”.
Trump firmó 31 órdenes ejecutivas, varias de ellas en materia migratoria, cambió las prioridades de detención y deportación de indocumentados y abrió una oficina para ayudar a víctimas de crímenes cometidos por inmigrantes, entre otras medidas en contra de la comunidad indocumentada.
El popular conductor de noticias de la cadena Univisión Jorge Ramos, también mexicano, señaló que los 100 días cumplidos el sábado han sido “de miedo” y recordó que los mexicanos arrestados sin un antecedente criminal en este período suman 5.441.
“Son personas cuyo único delito fue entrar ilegalmente a Estados Unidos ” y que “no vinieron de paseo a Disneylandia” ni han “matado o herido a nadie, robado, violado, traído drogas nilos han detenido manejando en estado de ebriedad”, afirmó.
Ramos citó un reciente estudio del Migration Policy Institute según el cual menos del tres por ciento de la población indocumentada comete un delito grave, contra el 6% del promedio estadounidense.
“Conclusión: los indocumentados se comportan mejor que los estadounidenses”, lo que contradice el discurso xenófobo deTrump, afirmó.