La mayoría de las personas fallecidas vivían en las riberas de los ríos o en barrancos y se vieron sorprendidas por la rápida crecida del caudal provocada por el aguacero.
De acuerdo con las autoridades, una persona más se encuentra desaparecida tras las lluvias.
Un total de 1.573 lugareños se vieron obligados a abandonar los sitios donde habitaban y se desplazaron a catorce albergues a causa de las precipitaciones, añadió la DPC.
En los dos departamentos citados, los más afectados por las lluvias en el norte del país, una decena de localidades sufrieron inundaciones como consecuencia de la crecida de cauces de ríos y arroyos.
La situación, indica el informe, se vio agravada por la saturación de suelos y las construcciones anárquicas de la zona, que obstruyen los canales naturales de escorrentía y drenaje.
Haití, en estado de emergencia, trata de recuperarse de los dañinos efectos que hace pocos días causó, a su paso por el Caribe, el huracán “Sandy”, que dejó 54 muertos, veinte desaparecidos y una veintena de heridos, según cifras oficiales.