El detenido gritó que tenía “algo” peligroso en la mochila y amenazó a varias personas en el aeropuerto, lo que causó cierto pánico y llevó a la Policía a advertirle de que dispararía si no se entregaba de inmediato. Schiphol Plaza, la zona comercial previa al acceso de seguridad del aeropuerto, fue desalojada de manera temporal para rastrear con perros-policía el área, y allí se trasladó un especialista en desactivación de explosivos que no encontró nada peligroso en la mochila del detenido.
Se desconoce la identidad del hombre y los motivos que le llevaron a amenazar a los viajeros del aeropuerto, y la Policía investiga lo ocurrido y está interrogando al sospechoso. La zona comercial del aeropuerto ha sido reabierta a la circulación y el tráfico de trenes se ha reanudado una hora después del incidente.