Según informó hoy este cuerpo de seguridad, a Bruno H.V., de 32 años y nacionalidad española, se le imputa un delito de detención ilegal en relación con la desaparición de Adriana Giogiosa, argentina, de 55 años, ya que aún no se puede contemplar un homicidio.
La Guardia Civil descarta por el momento que a Bruno H.V. se le puedan imputar más víctimas “y que sea un asesino en serie”, ya que han sido localizados los seis inquilinos que habían vivido en los últimos tiempos en la casa de Majadahonda, una localidad situada a 16 kilómetros de Madrid, en la que residía Adriana.
Ayer, los investigadores confirmaron que los restos humanos hallados en el interior de una trituradora localizada en la vivienda donde vivía la víctima a las afueras de Madrid eran de la mujer y la máquina estaba en un sótano al que sólo accedía con llave el casero detenido. El arrestado está imputado por el momento por un delito de detención ilegal por esa desaparición, aunque también se busca a su tía, llamada Lidia H.F. y de la que no se sabe nada desde 2011, cuando según su sobrino ingresó en una residencia.
Se sabe que en los primeros días de abril, cuando la familia de Adriana comenzó a sospechar que podía haberle pasado algo porque no contestaba a sus mensajes, Bruno fue en dos ocasiones a un centro comercial a comprar una gran cantidad de productos de limpieza y guantes, y limpió la vivienda durante dos días. La denuncia por la desaparición de Adriana se puso el 6 de abril, y tras tomar declaración al casero, los agentes lo detuvieron.