El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores filipino, Raúl Hernández, explicó en una intervención televisada que el incidente se produjo el pasado 27 de enero cerca del Bajo de Mansiloc, a unos 230 kilómetros de la costa noroeste de Filipinas y dentro de la Zona Económica Exclusiva del país.
“Nuestros pescadores tienen todo el derecho a ganarse la vida en nuestras aguas”, afirmó Hernández, quien añadió que han convocado al representante de la diplomacia china en Manila para protestar formalmente.
Los tres buques chinos agredieron con cañones de agua a dos pesqueros filipinos de los 14 que faenaban en la zona. “Instamos a China a que respete nuestra soberanía y los derechos de nuestros pescadores en nuestra zona (marítima)”, subrayó el portavoz filipino.
Según Hernández, el año pasado recibieron informaciones de nueve acciones de la misma naturaleza.
“La actitud de China es excesiva, expansiva e ilegal”, indicó el portavoz de Exteriores, quien consideró que esa actitud de Pekín “amenaza la paz y estabilidad de la región”.
El Gobierno chino considera territorio nacional la mayor parte del mar de China Meridional, lo que le enfrenta con varias naciones del Sudeste Asiático. Pekín y Manila se pelean desde hace años por el banco de arena de Scarborough, que los primeros llaman Huangyan y los segundos Panatag.
China y Vietnam se disputan las islas Paracel o Paracelso, que los primeros llaman Xisha y los vietnamitas Hoang Sa. Además, Brunei, China, Filipinas, Malasia, Vietnam y Taiwán reclaman total o parcialmente el archipiélago de las Spratly.