Correa pide a canciller que tome licencia para apoyar movimiento oficialista

QUITO. El presidente de Ecuador, Rafael Correa, reveló hoy que pidió a su canciller, Ricardo Patiño, que tome dos meses de licencia de su cargo para que en ese tiempo apoye en el fortalecimiento de las bases del movimiento oficialista Alianza País (AP).

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“Lo que va a hacer Ricardo es pedir dos meses de licencia”, dijo Correa a la prensa al insistir en la necesidad del apoyo del canciller en el fortalecimiento de la bases frente a recientes manifestaciones de críticos y opositores ocurridas, especialmente, en la capital ecuatoriana.

El gobernante señaló que Patiño tiene “mucha experiencia en organización territorial, organización política, etcétera”.

“Le he pedido que pida un par de meses de licencia para ayudarnos a fortalecer los centros de la revolución ciudadana, la organización de base de Alianza País, para que, en caso de emergencia, como le dije al país, en dos horas, repletemos la Plaza Grande”, señaló en referencia a la zona que queda al frente del palacio de Gobierno.

En la manifestación del pasado 2 de julio, los opositores y críticos a la Administración de Correa intentaron llegar a la Plaza Grande, donde se halla sede del Ejecutivo, pero no pudieron pasar pues la zona estaba fuertemente custodiada por la fuerza pública.

Mientras los manifestantes trataban de ingresar, simpatizantes del Gobierno participaban en una concentración del oficialismo en la Plaza Grande, en el casco colonial de Quito, donde Correa llamó a sus adeptos a mantenerse atentos frente a presuntas futuras acciones para desestabilizar su administración.

Correa reiteró hoy que ha pedido al titular de la diplomacia ecuatoriana que “ayude a fortalecer esa organización de base, sobre todo en Quito, y esa campaña de movilización para, en caso de problemas, tener 10.000 personas en dos horas en la Plaza Grande defendiendo la democracia”.

Las manifestaciones estallaron en junio pasado cuando Correa envió a estudio del Legislativo dos proyectos de ley que buscaban aumentar los impuestos a las herencias y la plusvalía, pero el mismo jefe de Estado retiró luego “temporalmente” esas iniciativas.

Pero ese retiro no frenó las protestas pues críticos y opositores al Gobierno insisten en pedir el archivo definitivo de los dos proyectos de ley, mientras el Ejecutivo insta a un diálogo nacional sobre los mismos y sobre el tipo de sociedad en la que quieren vivir los ecuatorianos.

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