“Hemos observado a Corea del Norte reemplazar sus viejos sistemas de armamento por este sistema de cañón rotativo” en algunos buques cerca del paralelo 38 que divide a ambos países, indicó una fuente a la agencia local de noticias Yonhap.
En caso de que los más de 380 barcos norcoreanos que patrullan en las aguas fronterizas cuenten con estas ametralladoras, “podría suponer una amenaza adicional para nuestra Fuerza Naval”, advirtió el informante.
Se cree que las ametralladoras Gatlking de Corea del Norte son el modelo de 12,7 mm fabricadas por la marca estadounidense General Electric, capaces de realizar hasta 2.000 disparos por minuto y alcanzar objetivos a un máximo de entre cinco y seis kilómetros de distancia.
La nueva arma elevaría considerablemente la capacidad de ataque de los barcos norcoreanos, que en general cuentan con anticuados cañones de artillería de uso manual.
Las fuerzas conjuntas de Corea del Sur y Estados Unidos han abierto una investigación para averiguar cómo Corea del Norte ha logrado hacerse con estas ametralladoras, ya que su comercio de armas está fuertemente restringido desde hace años por las sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
Otra fuente aseguró a Yonhap que Pyongyang también busca dotar a sus barcos de combate de tecnologías furtivas, ya que el Sur ha comenzado a desplegar buques de alta velocidad con esta característica.
La frontera marítima entre las dos Coreas, especialmente la del Mar Amarillo (Mar Occidental) es uno de los puntos más tensos de la región, en el que ambas partes han protagonizado fuertes conflictos en las últimas décadas.