El servicio de seguridad pública de Pyongyang, la capital norcoreana, detuvo el domingo a John Short, que había llegado la víspera al país en compañía de un grupo, declaró su esposa al periódico desde su casa de Hong Kong.
“Somos cristianos y hemos estado aquí (en Asia) durante 40 años”, contó Karen Short. “Es un hombre valiente (...) Corea del Norte es muy diferente, ese es el motivo por el que su corazón lo llevó hasta allí”, explicó. “Pido a la gente que rece por él”, añadió.
El misionero está siendo interrogado en Pyongyang sobre folletos religiosos en coreano que supuestamente llevaba. El ministerio de Relaciones Exteriores australiano afirma haber sido informado del caso de Short.
Australia, como la mayor parte de los países occidentales, no dispone de presencia diplomática en Corea del Norte y sus intereses en el país están representados por Suecia.
“Estamos en contacto estrecho con los responsables suecos en Pyongyang para asegurarnos de que se encuentra bien y obtener más información”, informó un portavoz del ministerio.