“Se trata de un acto ofensivo que busca socavar la mejora de las relaciones entre Corea del Norte y Corea del Sur”, afirmó la página web oficial de propaganda norcoreana Uriminzokkiri.
El editorial titulado “¿Es esto realmente necesario en pleno ambiente de diálogo?” criticó las maniobras iniciadas hoy por la 26ª División de Infantería Mecanizada de Corea del Sur en cinco localidades del noroeste del país, a escasos kilómetros de la Zona Desmilitarizada (DMZ) que divide a ambos países.
El ejercicio táctico de entrenamiento, que se desarrolla hasta el viernes y que nunca se había realizado con anterioridad, cuenta con la participación de tropas, tanques y vehículos blindados.
El Gobierno de Corea del Sur, de hecho, respondió a las críticas del país vecino al que instó a “no condenar nuestra actividad militar en la región del noroeste, ya que genera tensiones innecesarias”, según un portavoz del Ministerio de Unificación.
De este modo, el nuevo ejercicio militar ha abierto un nuevo foco de conflicto en la península coreana en un momento especialmente delicado, ya que Seúl y Pyongyang han convocado una próxima reunión de alto nivel el día 11 para buscar modos de mejorar sus relaciones y abrir una etapa de paz duradera.
Corea del Norte y Corea del Sur se encuentran técnicamente en guerra debido a que el conflicto que las enfrentó hace más de seis décadas concluyó con un armisticio nunca reemplazado por un tratado de paz definitivo.
Debido a esto, los ejercicios militares de Corea del Sur -especialmente si los realiza cerca de la frontera o en conjunto con EE.UU.- suelen ser blanco de las críticas y de las amenazas del régimen de Kim Jong-un.