A través de una carta remitida al secretario de Seguridad Nacional, el general retirado John Kelly, estas congresistas, todas ellas demócratas, consideraron la estrategia de separar a familias “obscena”, “cruel” e “inhumana”.
“Interferir en el vínculo padre-hijo es siempre inapropiado en circunstancias normales. Interferir en ese vínculo y separar a los niños de sus padres como una táctica gubernamental para hacer cumplir cualquier política es inhumano y obsceno”, apuntaron.
Las congresistas, además, consideraron que la estrategia va “flagrantemente en contra de los valores estadounidenses”.
“Creemos que esta política anti-familia es equivocada y le instamos encarecidamente a que no implemente”, agregaron.
Kelly anunció la semana pasada que su departamento está considerando cambiar la política actual de detenciones, que permite a padres e hijos permanecer juntos bajo custodia de las autoridades antes de ser liberados.
Con la nueva propuesta, los padres permanecerían bajo custodia de las autoridades en centros de detención para inmigrantes y los niños pasarían directamente al cuidado de los servicios sociales, mientras buscan a un pariente o una familia en Estados Unidos que quiera acogerlos.
La propuesta del Departamento de Seguridad Nacional está destinada a desalentar la inmigración irregular y se engloba dentro de la estrategia de mano dura del presidente, Donald Trump.