En declaraciones citadas hoy por el diario oficial China Daily, el ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, instó a los participantes en la reunión de los siete países más industrializados del mundo a no resaltar ese asunto y a adoptar una perspectiva “objetiva y justa”.
La creciente actividad militar de Pekín en el mar de China Meridional será uno de los asuntos que se espera que sean abordados por la cumbre, junto con la colaboración en la lucha antiterrorista, la respuesta a las últimas provocaciones de Corea del Norte y la situación de Crimea tras su anexión por parte de Rusia.
Wang advirtió de que si los cancilleres del G7 discuten sobre la disputas sobre la soberanía territorial que existen entre China y vecinos como Filipinas, Vietnam, Malasia, Taiwán o Brunei, se alterará la estabilidad regional en lugar de rebajar las tensiones.
La postura del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, según dijo Wang, es que las reuniones de grupos como el G7 o el G20, presidido en 2016 por China, deberían centrarse en las cuestiones económicas.
El canciller chino se ha reunido esta semana con dos de los ministros que participan en la cumbre de Hiroshima, los titulares de Exteriores de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, y Reino Unido, Philip Hammond.
Junto a Alemania y Reino Unido, los ministros de Japón, Estados Unidos, Canadá, Francia e Italia, así como la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, participan desde hoy en la reunión que servirá de preparación para la cumbre de líderes que se celebrará los días 26 y 27 de mayo el parque natural nipón de Ise-Shima.