Se trata de otro episodio del conflicto marítimo en el Mar de China Meridional.
En rueda de prensa, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino Hua Chunying pidió a Filipinas que dé “explicaciones racionales” sobre la detención, ocurrida ayer, y que los medios oficiales chinos atribuyeron inicialmente a “personas armadas no identificadas”.
Hua subrayó que China tiene derechos indiscutibles de soberanía sobre las islas Spratly (que los chinos denominan Nansha), incluyendo el Banco de la Media Luna, la zona donde ocurrió el incidente, un habitual lugar de pesca para los buques chinos.
El pesquero chino Qiongqionghai 09063, con una tripulación de 11 personas, navegaba en esa zona cuando otra embarcación, que según la parte china no se identificó, lo interceptó, y varios hombres armados de este segundo buque abordaron el pesquero, realizando varios disparos al aire y tomando control del barco.
Fuentes de la policía marítima de Filipinas confirmaron hoy en declaraciones a la prensa la detención, y alegaron que se produjo porque el buque chino estaba pescando tortugas protegidas por la ley medioambiental filipina, un extremo que no confirmó la portavoz china.
“Tenemos unas regulaciones y leyes que los pescadores deben respetar, pero todas las partes deben actuar con acuerdo a la ley y proteger los intereses legítimos para evitar una escalada de las tensiones”, destacó al respecto la fuente oficial.