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Veja, la revista más vendida de Brasil, es opositora a los gobiernos del presidente Luiz Lula da Silva y de Dilma Rousseff.
“Policarpo Junior es un periodista listo para atender los deseos del jefe del juego ilegal”, dijo en su informe el diputado Cunha.
Según la denuncia, Cachoeira y el periodista tenían relaciones más allá del vínculo fuente-reportero y en las páginas de la revista varios escándalos gubernamentales fueron proporcionados por el capo del juego a favor de ciertos lobbies dentro del gobierno federal.
La Editorial Abril que edita Veja dijo en un comunicado que la comisión parlamentaria tenía como objetivo “golpear a la credibilidad de la prensa libre por haber tenido un papel crucial en el mensalao”, la red de corrupción montada por el gobernante PT entre 2003 y 2005.
Otros cuatro periodistas de medios regionales fueron acusados de participar en la red de Cachoeira en el informe del parlamentario: son reporteros de medios como TV Brasilia, Opción de Goiás, Estado de Goiás y el online Redacao. Cachoeira, uno de los jefes del juego ilegal más poderosos del país, fue liberado el martes luego de pasar nueve meses en la prisión a raíz de una apelación.
El informe también pide investigar al procurador general de la República, Roberto Gurgel, por supuestamente archivar dos casos contra Cachoeira, cuyos tentáculos llegaron a varios ministerios en los últimos años.
Gurgel es el fiscal que acusó al PT por el mensalao que terminó en el juicio condenatorio al exministro de Lula José Dirceu y otros dirigentes partidarios.
El gobernador del estado central de Goias, Marconi Perillo, del opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), según el diputado instructor recibió cheques de la empresa de Cachoeira para vender una casa.
La constructora Delta, que tiene contratos con todos los niveles de gobierno, fue acusada de ser beneficiada por el cabildeo de Cachoeira a cambio de lavado de dinero.
Entre los acusados está Demóstenes Torres, exsenador del derechista Demócratas que defendía los intereses de Cachoeira en la Cámara alta, según se comprobó en escuchas telefónicas que le causaron la renuncia al cargo de legislador este año.