“Quiero manifestar con firmeza que Bolivia rechaza la pretensión del gobierno de Chile de desconocer la competencia de la Corte para resolver esta causa”, dijo en una declaración pública el presidente Evo Morales, en Sucre (sudeste del país).
El anuncio de La Moneda no fue una sorpresa para Bolivia que “había previsto esta posible contingencia”, señaló Morales, razón por la que con los equipos técnicos “ya analizamos los argumentos de nuestro país para hacer prevalecer la competencia” de la CIJ en este caso, comentó.
Morales subrayó que mientras Chile se dice “respetuoso del derecho internacional y de la vigencia de los tratados”, no asumió esa misma actitud “para invadir militarmente nuestro territorio, ocuparlo y enclaustrar a Bolivia” tras la Guerra del Pacífico en 1879.
“En ese tiempo teníamos también tratados y convenios vigentes, pero los gobiernos de Chile prefirieron el camino de la violencia bélica para apropiarse de territorios ajenos e imponer tratados y alegar que la invasión le daba derechos”, atajó.
El expresidente Carlos Mesa, uno de los delegados bolivianos para la causa marítima, dijo en su cuenta de la red social Twitter que la decisión chilena de impugnar a la Corte “no nos preocupa”, al considerar que la argumentación de Bolivia “es sólida” .
El excanciller Armando Loayza consideró de su lado que el gobierno de La Moneda, “presionado por factores internos, no ha tenido otra salida que presentar esta objeción” , a la que calificó de “posición dura”.
Asimismo, la experta en temas internacionales Karen Longaric, docente de la Universidad Católica en La Paz, estimó que “era lógico que Chile recurra a estos mecanismos procesales”.
Una primera medida de la CIJ “será suspender la demanda interpuesta por Bolivia y cambiar los plazos fijados” mientras se resuelve si corresponde o no la impugnación planteada, dijo Longaric en diálogo con periodistas.
La demanda boliviana ante La Haya pretende que la CIJ obligue a Chile a negociar la reintegración a Bolivia de su salida soberana al océano Pacífico.
Chile afirma que el asunto ya fue zanjado en un Tratado de Paz y Amistad en 1904 que definió los límites fronterizos entre ambos países.