Benedicto XVI, el primer Papa que renuncia en 700 años, abandonará sin ceremonias el jueves en helicóptero el Vaticano para instalarse provisoriamente en su residencia veraniega de Castelgandolfo.
El Papa, después de la renuncia, vestirá la “clásica sotana blanca” papal, precisó el portavoz del Vaticano, padre Federico Lombardi.
El último acto público de Benedicto XVI ha sido programado en Castelgandolfo, a 30 kilómetros de Roma, para “saludar a los fieles de esa diócesis” desde el pórtico de la residencia veraniega de los pontífices, precisó el vocero del Vaticano.