Según estimaciones del gobierno, la interconexión eléctrica entre Arica por el norte y Chiloé por el sur se concretará en el 2017 y se realizará a través de un línea de transmisión que actualmente está construyendo EC-L, filial de la franco belga GDF Suez.
“La interconexión de estos dos sistemas que cubren gran parte de nuestro territorio contribuirá a que tengamos un mercado eléctrico más eficiente, con seguridad de suministro, más sustentable social y medioambientalmente y, sobre todo, con menores costos”, dijo Bachelet en una ceremonia realizada en la localidad de Polpaico.
“Aquí estamos dando un gran paso para el interés general con una visión de largo plazo”, agregó. La mandataria detalló que gracias a la interconexión se podrá dar un uso más eficiente a la infraestructura, mejorar el desarrollo conjunto de las obras de generación y transmisión, quedar menos expuestos a riesgos hidrológicos o de falta de suministro de gas.
También indicó que permitirá fomentar la penetración de las energías renovables no convencionales (Ernc) al facilitar la conexión de proyectos eólicos y solares
Las estimaciones del gobierno apuntan a que la interconexión producirá beneficios económicos para el país en torno a los 1.100 millones de dólares.
“Esto se producirá gracias a una disminución de los costos de producir y transmitir electricidad y una reducción de precios, asociados a una mayor competencia y disminución de riesgos en el mercado”, dijo Bachelet.
“Y esto no es un hecho abstracto que sólo quedará registrado en las grandes cuentas de la economía. Esto se traducirá en mejoras reales y visibles para las personas y para las industrias”, recalcó.