El coloso, situado en el centro de los Andes de Ecuador, había generado ayer, domingo, siete explosiones, pero hoy aumentaron unas cuatro veces.
El actual pulso eruptivo del Tungurahua comenzó hace unos diez días y los científicos que vigilan su comportamiento prevén que éste se mantenga por algunos días.
En las últimas 24 horas el IG registró unos 60 sismos leves internos y 35 periodos de tremor o temblor constante por la salida de gas y ceniza.
Una fuente del Observatorio Volcán Tungurahua (OVT) , que el IG tiene cerca de la montaña, indicó a Efe que la ceniza, por efecto del viento, ha caído en poblados cercanos ubicados en el flanco oeste y suroeste como Cevallos, Quero, Mocha, Tisaleo y Pillate.
También se han escuchado surgir del interior de la montaña ruidos fuertes, como bramidos, así como cañonazos que acompañaban a la explosiones.
Asimismo, el IG indicó que pudo observar un flujo de piroclastos (rocas candentes) que rodó por una quebrada del flanco noroeste, pero que se detuvo a unos 200 metros de la pendiente bajo el borde del cráter.
El Tungurahua, de 5.016 metros de altura y situado a unos 80 kilómetros al sur de Quito, comenzó su actual proceso eruptivo en 1999 y desde entonces ha intercalado periodos de fuerte actividad con lapsos de relativa calma.
Integra el más de medio centenar de volcanes con los que cuenta Ecuador y junto al Reventador y Sangay forma parte de los más activos del país.