Las víctimas fueron identificadas como el presidente de Alges, Israel Antonio Quintanilla, de 56 años, y su hijo Carlos Alberto Zavala (25) . Ambos desaparecieron el pasado viernes cuando se transportaban en vehículo por el centro del país, informó a la AFP el portavoz de Alges, Pedro Chafoya.
Sus cuerpos fueron ubicados con heridas de bala en diferentes puntos de Santa Cruz Porrillo, unos 70 km al sureste de San Salvador, una zona de fuerte actividad pandillera. No se revelaron las posibles causas de los homicidios y el vehículo que utilizaban no ha sido localizado por la policía.
Quintanilla, quien sobrevivió a la guerra civil (1980-1992) como combatiente del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN, izquierda gobernante), tenía una prótesis en su rodilla izquierda y era presidente de Alges desde hacía nueve años.
“Condenamos enérgicamente a los autores intelectuales de este hecho infame y repudiamos cualquier expresión de violencia que tanto daña el avance social de nuestro país”, consignó en un comunicado Alges.
La Asociación de Lisiados demandó a las autoridades competentes investigar el “acto de barbarie” y para que no quede impune pidió aplicar “todo el rigor de la ley a quienes en un acto de cobardía han causado tanto dolor”.
El Salvador vive una ola de violencia que entre enero y marzo sumó 1.124 homicidios, un promedio de 16,2 homicidios por cada 100.000 habitantes en esos tres meses.
En 2014 se registraron 3.942 homicidios, equivalente a 68,6 homicidios por cada 100.000 habitantes.