“Hoy, 10 de Septiembre de 2015 hacia las 11:30 de la mañana (16:30 GMT) al sur de la ciudad de Pitalito, departamento del Huila, fue asesinada la periodista Flor Alba Núñez Vargas, directora de la emisora La preferida Stereo de ese municipio”, dijo la FLIP en un comunicado.
La comunicadora, que también trabajaba para varias televisoras locales, fue atacada con armas de fuego por “dos hombres que se movilizaban en una motocicleta (...), cuando se disponía a ingresar a la emisora donde transmitiría el informativo del mediodía”, puntualizó la FLIP.
Las tres hipótesis que se manejan sobre el asesinato tienen que ver con su trabajo, según la ONG. La primera versión apunta a la reciente publicación en el Facebook de la reportera de “fotografías de una banda delincuencial que realizó un atraco”, cerca de la alcaldía local.
La segunda “plantea una relación entre el asesinato y el cubrimiento sobre el proceso electoral” que tendrá lugar a nivel regional y local el próximo 25 de octubre en Colombia.
La tercera responde a que la “periodista habría recibido amenazas e intimidaciones” tras entrevistar a personas involucradas en el asesinato de un perro en agosto pasado, de acuerdo con el comunicado.
La FLIP, que lamentó lo ocurrido y pidió “diligencia” a las autoridades judiciales para resolver el caso, también informó que enviados de la ONG viajarán al municipio de Pitalito para “averiguar en terreno más detalles”.
De acuerdo con un reporte de la organización publicado a comienzos de este año, las amenazas y el espionaje fueron los principales problemas para ejercer el periodismo en 2014, año en que se registraron 131 agresiones contra la prensa.
Por otro lado, un informe del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) publicado en 2013, reveló que 41 reporteros han sido asesinados desde 1992 en Colombia, quinto país del mundo en cuanto a impunidad en casos de muerte de periodistas.