El vehículo, que no alcanzó su objetivo, fue detonado “inesperadamente” en una zona de negocios, dijo a Efe el portavoz de la Policía, Nur Mohamed. Las fuerzas de seguridad se desplazaron al lugar de los hechos para rescatar a los varios heridos alcanzados por la explosión.
El grupo terrorista somalí Al Shabab reclamó la responsabilidad del ataque horas después de la explosión, aunque no mencionó el número de víctimas.
El último atentado, de similares características, tuvo lugar hace tres días cuando al menos siete personas murieron en una explosión cerca del palacio presidencial, horas después de que el primer ministro, Hassan Ali Kheyre, anunciara la formación del nuevo Gobierno.
Entonces Al Shabab reclamó también la autoría del atentado y amenazó con aumentar los ataques, después de la formación del nuevo Ejecutivo.
Al Shabab atacó también la semana pasada causando la muerte de al menos trece personas y heridas a otras quince en dos atentados con coche bomba perpetrados casi simultáneamente en la puerta de un hotel y cerca de una base militar en Mogadiscio.
La milicia islamista anunció en 2012 su adhesión formal a Al Qaeda y lucha por instaurar un Estado islámico de corte wahabí en Somalia, donde controla grandes extensiones de territorio en el sur y el centro del país.
Al Shabab perpetra habitualmente atentados contra civiles, policías, representantes del Gobierno y militares.
En los últimos meses, los terroristas han optado por una estrategia de confrontación directa y han lanzado varios ataques contra bases militares de la misión de la Unión Africana en Somalia (AMISOM), lo que ha causado la muerte de centenares de soldados.
Según un reciente informe de la ONU, Al Shabab sigue teniendo capacidad para efectuar acciones a gran escala tanto dentro como fuera de Somalia y la situación de la seguridad en el país africano “no ha mejorado”.