Los fiscales creen que los tripulantes no llevaron a cabo operación de salvamento alguna y en su lugar se resguardaron en la cabina mientras esperaban a ser rescatados por la Guardia Costera, informó la cadena surcoreana Arirang.
Los cargos que se imputan a los miembros de la tripulación conllevarían un mínimo de 3 años de prisión.
En cuanto al capitán, que permanece arrestado por el mismo motivo, las autoridades lo acusan de “ asesinato por omisión ” por presuntamente no evacuar el barco dejando atrapados a la mayoría de los pasajeros.
Algunos tripulantes interrogados han admitido que no trataron de rescatar a los pasajeros a bordo, mientras hoy el jefe de máquinas se defendió.
“ Yo no pretendí huir ” dejando a los pasajeros atrás, respondió el maquinista a la prensa tras comparecer ante un tribunal en la localidad portuaria de Mokpo, al suroeste del país y cerca de las aguas donde naufragó el ferry el miércoles 16.
Las autoridades creen que el maquinista pudo escapar a través de un pasaje reservado a los miembros de la tripulación tras solicitar a los pasajeros que no se movieran, pero él asegura que escapó “ justo antes de que el buque comenzara a volcarse por completo ” .
La investigación ha desvelado que siete miembros de la tripulación, incluido el jefe de máquinas, figuran entre los primeros en llegar a la costa en un bote salvavidas tras el rescate.
El buque Sewol comenzó a inclinarse la mañana del miércoles 16, supuestamente por un giro brusco que provocó el desplazamiento de la carga, y en poco más de una hora ya estaba completamente hundido.
De las 476 personas que viajaban en el barco solo 174 pudieron ser rescatadas, entre ellas casi toda la tripulación, mientras el número de muertos confirmados alcanza hoy los 171 y otros 131 pasajeros, la mayoría adolescentes, permanecen desaparecidos sin ya esperanzas de hallarlos con vida.