“Estoy convencida, porque así me lo han contado, que muchos refugiados han decidido dejar atrás unas condiciones de miseria y de falta de perspectiva y arriesgar la vida de sus familias en busca de una posibilidad de supervivencia en Europa”, dijo Melissa Fleming, portavoz del ACNUR.
El programa de asistencia a los refugiados en los países limítrofes, que llega a 4 millones de personas, sólo cuenta con un 37 por ciento de los 4.500 millones de dólares solicitados, y sólo este mes el Programa Mundial de Alimentos (PAM) ha cortado su asistencia alimenticia a 229.000 refugiados sirios en Jordania.