"El hambre se extiende y profundiza, deliberada y provocada por el hombre", denunció hoy Lazzarini en la red social X tras más de 50 días de bloqueo israelí, desde que el 2 de marzo el Gobierno de Benjamín Netanyahu anunciase que no entrará en el enclave palestino ni agua, alimentos, medicamentos, ayuda humanitaria o combustible.
Las importaciones comerciales están oficialmente prohibidas desde octubre de 2024.
"Dos millones de personas, la mayoría mujeres y niños, sufren un castigo colectivo (...) Mientras tanto, las organizaciones humanitarias tienen ayuda lista para llegar a Gaza. Esto incluye casi 3.000 camiones de ayuda vital de UNRWA", añadió Lazzarini, que pidió el fin del bloqueo.
"Los suministros básicos destinados a las personas necesitadas están caducando", continuó.
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Dentro del enclave se están agotando los medicamentos, vacunas y material médico, mientras que las ambulancias han tenido que reducir los servicios esenciales porque casi no hay gasolina y el gas para cocinar ha desaparecido de los mercados.
UNICEF calcula en "decenas de miles" los niños desnutridos en Gaza, indicó a EFE su portavoz en Palestina, Kazem Abu Khalaf, ya que "el consumo de grupos de alimentos clave como la carne, los lácteos, las verduras y las frutas sigue siendo críticamente bajo".
