En los primeros tres meses del año, Migraciones, en coordinación con la Policía Nacional, realizó 1.123 operativos de verificación y fiscalización migratoria en la surandina Puno (20,9 %), la selvática Pucallpa (11,8 %), la norteña Tumbes (10 %) y la amazónica Tarapoto (9,2 %).
Asimismo, los operativos comprendieron también las ciudades de Lima, Arequipa, Chimbote, Callao, Chiclayo, Cuzco, Huancayo, Ica, Iquitos, Puerto Maldonado, Tacna y Trujillo.
Las 760 expulsiones se realizaron mediante el Procedimiento Administrativo Sancionador Especial Excepcional (PASEE), que permite la rápida expulsión de los infractores en un plazo máximo de 24 horas, por haber entrado al Perú sin cumplir con la normativa migratoria y/o representar una amenaza para la seguridad nacional y el orden interno.
El PASEE consta de una fase instructora y otra sancionadora, mediante la cual se les comunica a los infractores las respectivas imputaciones, explicó Migraciones.
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Después de finalizar el proceso, Migraciones, a través de sus jefaturas zonales, emite las órdenes de expulsión, que son ejecutadas por la Policía Nacional.
La Superintendencia de Migraciones ha implementado una oficina móvil, con cuatro módulos de trabajo, que permite verificar el estatus migratorio e iniciar los procedimientos sancionadores 'in situ' a los presuntos infractores intervenidos por la Policía Nacional del Perú.