"El sector minero aún no se ha traducido en beneficios económicos proporcionales a su potencial”, afirmó el viceprimer ministro paquistaní Ishaq Dar durante la inauguración de un foro minero internacional de dos días en Islamabad.
“Para desbloquear ese potencial necesitamos más que capital: requerimos compromiso, colaboración y visión a largo plazo", añadió.
Dar enfatizó la posición estratégica de Pakistán para emerger como un actor global significativo en la minería, instando a inversiones que sean "con propósito, visionarias y con el bienestar del pueblo de Pakistán en mente".
A pesar de albergar importantes depósitos minerales, incluyendo la mina de Reko Diq – una de las mayores reservas sin explotar de cobre y oro del mundo, con una estimación de 5.900 millones de toneladas de mineral –, la región de Baluchistán ha enfrentado décadas de violencia e insurgencia.
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Esta inestabilidad ha dificultado significativamente la exploración y el desarrollo de su rica riqueza mineral.
Pakistán posee importantes reservas de cobre, oro, plomo, zinc, azufre, tierras raras, minerales industriales y piedras preciosas como peridoto y esmeralda, muchas de ellas ubicadas en la Faja Metalogénica de Teti, una de las zonas más ricas del mundo en recursos del subsuelo
Estados Unidos, uno de los países participantes, elogió los pasos dados por Pakistán para crear un entorno competitivo para los inversores y destacó los "éxitos" recientes en la relación bilateral, como la reanudación de las exportaciones agrícolas hacia el país asiático.
"Los minerales críticos son las materias primas para nuestras tecnologías más importantes, y el presidente Trump ha subrayado la importancia de asegurar el futuro de los minerales de Estados Unidos", dijo el funcionario principal de la Oficina para Asuntos de Asia Meridional y Central del Departamento de Estado de EE.UU., Eric Meyer.
El foro, que se celebra entre el 8 y 9 de abril, reúne a unas 2.000 autoridades y representantes de empresas mineras de países como Arabia Saudí, China y Estados Unidos, con el objetivo de posicionar a Pakistán como nuevo polo global en la industria de minerales estratégicos.
