A pesar de la incertidumbre actual y la reacción de los mercados con fuertes caídas, De Guindos se muestra optimista y sostiene que es una llamada de atención a Europa para ser "más autónomos e independientes" tanto en energía, como en defensa o económicamente.
En su opinión, hay que intentar negociar con Estados Unidos, "con la cabeza fría y que no te avasallen", pero mostrando las bazas y la voluntad de negociación, explicó durante su intervención en la asamblea de la Asociación Española de Banca (AEB).
También abogó por que Europa culmine la integración de los mercados de bienes y servicios, que limita la productividad, además de la unión de mercados de capitales y la unión bancaria.
Y "lo más importante", insistió, es actuar unidos. "Si Europa se divide, será más complicado", advirtió.
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Por el momento, reflexionó, la respuesta de Europa a las medidas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha sido "prudente, cauta" y cree que "inteligente", pero a renglón seguido advirtió de que la no integración de los mercados de bienes y servicios pone a Europa en una situación de desventaja.
También lamentó que no se hable del mercado laboral y tener una regulación laboral común, algo que piensa podría ser útil.
De Guindos recordó que en momentos de incertidumbre es cuando Europa suele tomar las decisiones correctas y confió en que en esta ocasión suceda lo mismo. De lo contrario "perderemos la oportunidad", alertó.
En el lado positivo, destacó, los altos niveles de capital y liquidez de los bancos españoles y europeos para que la financiación siga llegando a la economía productiva. "No hay nada como tener una banca solvente y líquida en momentos de inquietud", elogió, aunque ello no ha evitado que se produzcan grandes caídas en bolsa.
"No ha habido una situación de pánico", subrayó De Guindos, que sostuvo que, a futuro, lo que parece preocupar a los mercados es la posibilidad de una segunda ronda de aranceles que llevaría a una guerra comercial.