El jurado valoró que el poemario de Miki Garofolo "presenta un profundo sentido del lenguaje poético, una definición de tópicos en absolutos que abarcan y envuelven al lector, por su forma lírica y sin complejos, por su verso al borde de la justeza, y sobre todo, por su arriesgada apuesta en la subversión de los convencionalismos a través del cómo, su rebelión semántica e irreverencia gramatical", informó este miércoles el Ayuntamiento de Baena.
El premio consiste en una escultura y la edición de la obra, de la cual uno de los poemas será traducido a varios idiomas y cien ejemplares para el autor.
La cuarta edición también fue para un autor italo-argentino Christian Ezequiel Mologno, un italiano nacido en Buenos Aires (Argentina) y con residencia en ese momento en España.
