Según informó en Telegram el Comité de Instrucción de Rusia (CIR), los acusados ingresaron ilegalmente en territorio ruso en agosto y septiembre de 2024 con el objetivo de "cometer acciones terroristas".
"Junto a otros militares ucranianos cruzaron la frontera en el distrito de Sudzha de la región de Kursk y participaron en la ocupación de Gúevo, Pléjovo, Borki y la aldea Spálnoye del distrito de Sudhza. Poco después fueron detenidos y mantenidos bajo custodia en espera de sentencia", indicó el CIR.
La Justicia rusa ya ha condenado por causas similares a varios prisioneros de guerra ucranianos.
La semana pasada condenó a penas de entre 15 a 17 años de cárcel a ocho soldados ucranianos, y en febrero, a penas de entre 15 y 16 años de cárcel a otros ocho prisioneros, todos capturados en Kursk.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Tras más de seis meses de ocupación ucraniana, las fuerzas rusas lograron recuperar la ciudad de Sudzha, la principal plaza fuerte ucraniana en Kursk, y continúan sus intentos de expulsar definitivamente a las fuerzas ucranianas de esta región.
Durante la conversación sostenida entre los presidentes de Rusia y Estados Unidos, Vladímir Putin y Donald Trump, respectivamente, el mandatario ruso prometió a su homólogo estadounidense un "trato digno" acorde a las leyes rusas y el derecho internacional para los prisioneros de guerra ucranianos capturados en Kursk.
Aún así, Putin puntualizó que Rusia tratará a todos los soldados ucranianos y extranjeros capturados en Kursk como terroristas.
"Según la legislación rusa, todos los soldados ucranianos, especialmente los mercenarios extranjeros, que se encuentran en nuestro territorio y que hayan atentado contra la población civil, (...) serán calificados por ley como terroristas", dijo.
