"Lo que nos están haciendo tanto el Gobierno (israelí) como los terroristas (Hamás) es algo insoportable", dijo hoy en una videoconferencia la israeloargentina Silvia Cunio, que tiene a dos de sus hijos -Ariel y David- aún secuestrados en Gaza.
"Aún estoy como el 7 de octubre. Es el 7 de octubre más largo de mi vida. Mis dos hijos están allá, en Gaza y es muy difícil todo esto", añadió Silvia, del kibutz Nir Oz, en una charla organizada por las organizaciones MediaCentral y la norteamericana Fuente Latina.
Durante un alto el fuego de apenas dos meses, que se terminó el pasado 18 de marzo cuando el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, decidió volver a bombardear Gaza, un total de 30 rehenes con vida y ocho cadáveres fueron intercambiados por cerca de 2.000 detenidos y presos palestinos.
Desde entonces, no se han producido avances ni se ha dado pase a la segunda fase del acuerdo, que implicaba, según lo pactado entre Israel y Hamás, el fin definitivo de la guerra y la retirada de tropas israelíes a cambio del resto de rehenes.
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"Espero que pronto se llegue a una solución y que traigan a todos los rehenes de vuelta", dijo por su parte Ruth Strom, la madre de los también israeloargentinos Iair y Eitan Horn.
Iair, de 46 años, fue liberado durante el alto el fuego el pasado 15 de febrero, pero su hermano menor sigue en Gaza.
"Iair está acá con nosotros pero en cuerpo, su alma sigue allá (en Gaza). Sigue preocupado por Eitan y por los secuestrados que están allí", dijo Strom, que dice que hasta que la familia no esté completa no podrá haber reuniones y celebrar festividades como hacían antes.
El retorno a la guerra en Gaza, la semana pasada, como el cese por Netanyahu del jefe de los servicios secretos israelíes (el Shin Bet) han provocado protestas multitudinarias tanto en Jerusalén como Tel Aviv, y hoy mismo algunos familiares de los aún cautivos cortaron el tráfico en Jerusalén e irrumpieron en la Knéset (Parlamento israelí) con folios con el número 59 escrito en ellos.
"El pueblo está conmigo, yo siento el abrazo de ellos y ellos me ayudan a seguir adelante", sentenció Strom.
Aún quedan 59 rehenes en Gaza, entre los que se estima que 35 están muertos. Entre ellos se incluyen 13 soldados (Israel ha confirmado la muerte de nueve) además de cinco extranjeros (tres tailandeses, un nepalí y un tanzano).
