Haq confirmó que hay una persona muerta, una segunda en estado crítico y cuatro más heridos graves, todos ellos funcionarios de la ONU, pero no dio sus nombres ni nacionalidades.
Aunque el portavoz no acusó a Israel del ataque por su nombre, el secretario general António Guterres afirmó poco antes en un comunicado que "las ubicaciones de todos los locales de la ONU son conocidas por las partes en conflicto, que están obligadas por la ley internacional a mantener su absoluta inviolabilidad".
En ese comunicado, Guterres pidió "una investigación completa" del incidente, y subrayó que las reglas de combate implican que los enfrentamientos deben llevarse a cabo "de modo que los civiles sean respetados y protegidos".
Con el ataque de hoy, la ONU ha perdido en la guerra de Gaza a 280 de sus funcionarios, casi todos ellos -hasta que se confirmen los detalles de hoy- por ataques de Israel.
Los locales que fueron objeto del ataque en la mañana de este miércoles funcionaban como "casas de huéspedes", es decir, edificios destinados a albergar a personal no residente en Gaza que se encuentran en misión de trabajo.
El portavoz aclaró que, en el caso concreto de Deir al Balah, los dos edificios atacados ya lo habían sido la noche anterior, y de hecho los funcionarios que allí se encontraban estaban examinando los daños sufridos por el ataque previo cuando fueron alcanzados por el nuevo ataque.