Los militares rusos golpearon en las últimas 24 horas concentraciones de soldados ucranianos en cuatro localidades de Kursk y "las pérdidas de las Fuerzas Armadas ucranianas en un día superaron los 220 hombres (...) La operación para la eliminación de las formaciones ucranianas continúa", agrega la nota.
La víspera, el Ministerio de Defensa de Rusia anunció la recuperación de dos nuevas localidades en Kursk en el marco de su ofensiva para expulsar a tropas ucranianas que irrumpieron en esa región rusa en agosto de 2024.
El presidente ruso, Vladímir Putin, se desplazó el miércoles por primera vez a Kursk, donde ordenó aplastar a los "terroristas" ucranianos, que aún se encuentran en esa región.
Mientras el viernes, tras un llamamiento del líder estadounidense, Donald Trump, de salvar la vida a las fuerzas ucranianas cercadas en Kursk, Putin aseguró que se les garantizará la vida y un trato digno si deponen las armas.
El Kremlin advirtió de que el tiempo para aceptar esa propuesta se estaba acabando.
Ucrania, a su vez, niega el cerco de sus fuerzas, pero reconoce el repliegue de algunas zonas ante el empuje ruso.