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Residentes, empresas y autoridades locales colaboran para limpiar casas en el litoral de Santa Catarina, duramente afectado. Despejar calles, accesos y reparan daños. Desde el jueves, al menos 13 ciudades han declarado estado de emergencia debido a las inundaciones.
En la capital, las calles previamente inundadas ya están abiertas. Sin embargo, un punto crítico persiste en la BR-101 en Biguaçu, cerca de la entrada de Governador Celso Ramos, donde el asfalto cedió y la carretera está completamente bloqueada. Las autoridades recomiendan desviar por el contorno de la Gran Florianópolis.
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Trabajos intensos de limpieza
Máquinas trabajaron durante la noche en Itapema para retirar escombros. En Balneário Camboriú y Camboriú, la limpieza continúa con el apoyo de municipios vecinos. Las familias afectan encuentran refugio en albergues temporales, aunque algunas ya regresan a sus hogares.
Rodeio, en el Valle del Itajaí, también sufrió con las lluvias, especialmente el viernes, cuando las calles se convirtieron en ríos. La limpieza en este lugar es esencial y continua.
En Florianópolis, las acciones comenzaron el viernes, con esfuerzos concentrados en mejorar el drenaje alrededor del Lago de las Banderas y liberar la pista en Romualdo de Barros. También se prioriza la limpieza en avenidas principales como Gustavo Richard y Beira-Mar Norte. Se está evaluando los daños, concentrándose inicialmente en áreas como Monte Verde y Santo Antônio.
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Las zonas más afectadas por las lluvias
La situación en São José es crítica, con áreas como Flor de Nápolis y Colônia Santana profundamente afectadas. La priorización es la recolección de escombros y lavado de vías.
Los investigadores analizan las causas del fenómeno climático, dado que los modelos meteorológicos no anticiparon la magnitud de las precipitaciones, que superaron los 400 milímetros en ciertas áreas, una cifra mucho mayor a lo esperado para todo el mes.
Las lluvias comenzaron en la madrugada del jueves, afectando a Balneário Camboriú y después a la Gran Florianópolis, resultando en graves inundaciones.
En Camboriú, las lluvias causaron que áreas enteras quedaran inaccesibles. La autopista BR-101 enfrenta daños significativos, sin fecha prevista de reapertura. En Biguaçu, similarmente, las aguas han resultado en el cierre de vías fundamentales.
La evaluación y reparación continúa en todas las áreas afectadas y se espera que las operaciones de limpieza y reparación del pavimento comiencen la próxima semana.