"Las existencias de combustible siguen siendo demasiado escasas, ya que el Hospital necesita al menos 5.000 litros diarios y la estimación de las actuales reservas es de sólo tres días, incluso reduciendo el consumo", explicó MSF en un comunicado.
La ONG denunció que el "desmantelamiento del sistema sanitario" por el bloqueo israelí está poniendo en peligro la vida de la población de Gaza y pidió su "cese inmediato".
Además, solicitó a todas las partes que faciliten la entrada de combustible en la zona y garanticen el suministro seguro a las instalaciones médicas.
Este miércoles, la organización ya alertó de que el Naser, junto con el hospital Al Aqsa y el Europeo de Gaza estaban a punto de cerrar por la falta de combustible e informó de que los equipos de la ONG estaban transfiriendo combustible a los hospitales de Nasser y Al Aqsa como "solución provisional" para los siguientes días.
MSF, que opera dentro de las instalaciones del hospital, explicó que aún priorizando las operaciones de emergencia y manteniendo muchos servicios "a capacidad mínima", el Naser necesita 2.500 y 3.000 litros diarios de combustible.
Muchas zonas del hospital tienen cortada la electricidad: sólo el pabellón infantil, la UCI neonatal, los quirófanos y el suministro de oxígeno siguen en funcionamiento.
La organización detalló que sus equipos en el hospital Naser, que tiene capacidad para 500 camas, tratan una media de cien casos de neumonía al mes, por lo que el suministro de oxígeno, que necesita de combustible para su funcionamiento, es una de las principales necesidades del hospital.
También es necesaria la corriente eléctrica -obtenida gracias a los generadores alimentados por combustible- para las más de cien cesáreas mensuales que se realizan en el centro, además de para la atención con ventilación mecánica e incubadoras de recién nacidos.
Los centros hospitalarios del centro y del sur de Gaza son imprescindibles para mantener el ya muy golpeado sistema sanitario gazatí, teniendo en cuenta que los tres principales del norte (el Kamal Adwan, el Indonesio y el Al Awda) han quedado fuera de servicio por el asedio que han impuesto las tropas israelíes en esta zona.
En diciembre de 2024, solo pudieron entrar en Gaza una media de 59 camiones al día con suministros vitales, frente a los 500 camiones que entraban diariamente antes del estallido de la guerra, el 7 de octubre de 2023, según Naciones Unidas.