El portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Ismail Baghaei, condenó “los agresivos ataques del régimen israelí” y los calificó como “una fragante violación de los principios y las normas de la ley internacional y la Carta de Naciones Unidas”.
“Estos crímenes del régimen sionista se llevan a cabo con el apoyo total de Estados Unidos. Washington es cómplice de la anarquía y los crímenes del régimen criminal de Tel Aviv”, dijo Baghaei en un comunicado recogido por medios iraníes.
Teherán respalda a los hutíes del Yemen, que forman parte del llamado Eje de la resistencia, la alianza antiisraelí liderada por Irán y de la que forman parte los palestinos de Hamás, los libaneses de Hizbulá y una miríada de milicias en Irak.
El Ejército de Israel bombardeó posiciones militares de los rebeldes hutíes yemeníes -respaldados por Irán-, entre ellas por primera vez en la capital Saná, después de que Israel interceptara un misil desde el Yemen.
Cazas israelíes "atacaron objetivos militares pertenecientes al régimen terrorista hutí en la costa occidental y en el interior del Yemen", afirmó en un comunicado el Ejército israelí.
De acuerdo a la televisión yemení Al Masirah, portavoz de los rebeldes hutíes, Israel lanzó cuatro ataques aéreos israelíes teniendo como blanco el puerto de Al Hodeida y dos acciones fueron contra instalaciones petrolíferas de Ras Issa, informó Al Masirah.
Por otro lado, otras cuatro acciones atacaron la central eléctrica de Heziaz, en el sur de la capital yemení, y otros dos contra la central eléctrica de Dhabhan, al norte de la capital, añadió.