La moneda única cotizaba a 1,0490 dólares hacia las 16.00 horas GMT de este viernes, por encima de los 1,0477 dólares del día previo, pero por debajo de los 1,0529 dólares en los que cerró la pasada semana.
Por su parte, el BCE fijó el tipo de cambio oficial en 1,0518 dólares.
El euro cerró la semana por debajo de la barrera de los 1,05 dólares después de que el BCE sumara el jueves su cuarto recorte del año, el tercer consecutivo, y situara la facilidad de depósito en el 3 %.
En paralelo, los economistas del organismo rebajaron una décima su previsión de crecimiento para la eurozona este año, hasta el 0,7 %, en tanto que para 2025 revisó dos décimas a la baja su pronóstico anterior, hasta el 1,1 %.
En este sentido, los analistas de Banca March apuntaron que las nuevas previsiones de la autoridad monetaria señalan un menor crecimiento e inflación de cara al próximo año, "algo que confirma la idea de que el BCE irá más rápido que la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos en materia de recortes".
Además, durante la jornada también se conoció que el Bundesbank, el banco central de Alemania, revisó "bruscamente a la baja" sus proyecciones económicas para el país hasta 2026 y ahora prevé que el PIB se contraiga un 0,2 % en 2024, frente al crecimiento del 0,3 % que pronosticaba el pasado junio.
El organismo también recortó en nueve décimas el crecimiento económico previsto para 2025, hasta el 0,2 %, y en seis décimas el de 2026, hasta el 0,8 %; al tiempo que situó en el 0,9 % el de 2027.