En su informe, Frontex contabiliza 220.700 casos de migración irregular en los primeros 11 meses de este año, una disminución del 40 % con respecto al mismo período del año pasado.
La agencia europea atribuye este descenso a la menor actividad en dos rutas migratorias: la de los Balcanes occidentales, con una reducción del 80 %, y el Mediterráneo central, con una disminución del 60 %.
A pesar de la tendencia general a la baja, la ruta de África occidental ha alcanzado un máximo histórico, superando el total de llegadas de 2023.
Desde comienzos de año hasta el final de noviembre, se registraron 41.800 cruces en esta ruta, la cifra más alta desde que Frontex comenzó a recopilar datos en 2009.
En noviembre de 2024, esta fue la ruta migratoria más transitada de Europa, con casi 7.600 llegadas irregulares.
El aumento en la ruta de África occidental se atribuye al deterioro de la situación humanitaria y de seguridad en la región subsahariana, según indica la agencia europea con sede en Varsovia.
Según las autoridades de Frontex, las redes de tráfico de personas se aprovechan de esta situación y envían cada vez a más personas en condiciones peligrosas hacia las Islas Canarias.
"El viaje a través del Atlántico es largo y peligroso", se puede leer en el informe, "y trágicamente ha habido un aumento en las muertes en el mar".
Por otro lado, las fronteras terrestres orientales registraron el mayor aumento de actividad en lo que va de año, donde hubo un incremento del 200 % con 16.530 llegadas irregulares en total.
La gran mayoría de las personas detectadas en esta ruta eran hombres ucranianos en edad militar, según comprobó Frontex.
Otras rutas migratorias también están experimentando cambios y, por ejemplo, la ruta del Mediterráneo oriental ha experimentado un aumento constante del 18 %, hasta un total de 64.000 llegadas en los primeros once meses del año.
Las medidas preventivas adoptadas por las autoridades tunecinas y libias para desmantelar las actividades de los traficantes han contribuido a la disminución en la ruta del Mediterráneo central, asegura la agencia, pero "la situación en la ruta de África occidental sigue siendo preocupante y requiere atención urgente para abordar las causas subyacentes de la migración y mejorar la seguridad de los migrantes", advierte.