Antony Blinken expresó al ministro de Exteriores de Corea de Sur su “profunda preocupación” sobre la declaración de Yoon de la ley marcial la noche del martes, que horas después suspendió tras haber sido votada en contra por el Parlamento, a lo que dio la bienvenida el jefe de la diplomacia estadounidense, según un comunicado del Departamento de Estado.
El secretario de Estado expresó su confianza en la “resiliencia” de la democracia surcoreana, del que EE.UU. es su mayor socio en Defensa, y dijo confiar en que “el proceso democrático prevalezca”.
Asimismo, reafirmó el compromiso de EE.UU. con la alianza con Corea del Sur y dijo que el país trabaja “codo con codo” con el pueblo surcoreano frente a provocaciones o amenazas a su unión, en velada referencia a Corea del Norte.
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Investigación policial
La Policía surcoreana abrió este jueves una investigación al presidente Yoon por la sospecha de que cometió traición al declarar el pasado martes la ley marcial, lo que se suma a la moción para la destitución del mandatario que la oposición prevé votar este sábado.
La investigación de las autoridades surcoreanas se conoció el mismo día en que Yoon aceptó la dimisión del ministro de Defensa, Kim Yong-hyun, señalado por su responsabilidad en el despliegue de tropas en la Asamblea Nacional tras la aplicación de la ley marcial, una medida que derivó en horas de gran tensión en la sede parlamentaria y a la que respondió la población con protestas.
Yoon declaró la ley marcial argumentando que la oposición -a la que acusó de “pronorcoreana”- estaba llevando a cabo con sus políticas “actos antiestatales”, pero esta medida fue revocada por la propia Asamblea Nacional pese a los intentos del Ejército por impedirlo, obligando al presidente a invalidarla apenas seis horas después de haberla decretado.
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