En su página de Facebook, el canal de comunicación que usa desde que huyó del país para supuestamente refugiarse en Sudáfrica, Mondlane anunció una "cuarta etapa" de movilizaciones cuya "primera fase" de desarrollará el miércoles, jueves y viernes próximos.
"Mientras un grupo se centra en las capitales de provincia, otro grupo se centrará en las fronteras. Manifestémonos en las fronteras. Y también nos manifestaremos en los puertos", adelantó el líder opositor a última hora del lunes en declaraciones que recogen este martes medios locales.
"Nuestro objetivo no es dar un golpe de Estado, queremos presionar a las instituciones de Justicia para que se restaure la verdad electoral", aseguró.
La vecina Sudáfrica reabrió el pasado fin de semana la frontera con Mozambique, tras anunciar el pasado miércoles que la había cerrado por la escalada de las protestas poselectorales.
Una relativa calma retornó a Mozambique el pasado viernes después de que el día anterior la Policía, apoyada por el Ejército, reprimiera la llamada "Marcha sobre Maputo", manifestación convocada por Mondlane.
El principal promotor de las protestas es el propio Mondlane, quien concurrió a los comicios del pasado 9 de octubre como independiente pero con el apoyo del Partido Popular Optimista para el Desarrollo de Mozambique (Podemos).
Desde el 21 de octubre, el aspirante presidencial ha convocado jornadas de huelga general y movilizaciones contra las presuntas irregularidades en las elecciones y el asesinato el pasado 18 de octubre de un abogado y de un dirigente de Podemos.
Organizaciones pro derechos humanos como Human Rights Watch (HRW) y Amnistía Internacional (AI) han pedido el fin de la represión policial, que ha causado al menos 34 muertos, según la ONG mozambiqueña Centro para la Democracia y los Derechos Humanos (CDD).
Según los resultados provisionales de la Comisión Nacional de Elecciones (CNE), que todavía debe validar el Consejo Constitucional, el oficialista Daniel Chapo ganó las elecciones presidenciales con el 70,67 % de los votos.
Ese triunfo permitiría mantenerse en el poder al Frente Popular de Liberación de Mozambique (Frelimo), que dirige el país desde la independencia de Portugal en 1975.
En segundo lugar, con el 20,32 %, quedó Mondlane, por delante de Ossufo Momade, de la hasta ahora principal fuerza de la oposición Resistencia Nacional Mozambiqueña (Renamo), que obtuvo el 5,81 %.
El cuarto aspirante en liza, Lutero Simango, del Movimiento Democrático Mozambiqueño (MDM), logró el 3,21 % de los votos.
Aunque la jornada electoral se desarrolló en calma, la misión de observación de la Unión Europea constató "irregularidades" en el recuento de votos, mientras el presidente de la Conferencia Episcopal de Mozambique (CEM), el arzobispo Inácio Saure, denunció "graves fraudes" en la votación.