Los datos señalan que los ingresos por la exportación del grano entre octubre de 2023 y agosto de 2024 sumaron más de 106,7 millones de dólares, frente a los 143 millones del mismo lapso de la cosecha 2022-2023.
La diferencia a la baja, a falta de un mes para que concluya el ciclo actual, es de más de 36,3 millones de dólares, lo que equivale al 25,4 % de reducción en los ingresos por estas exportaciones.
El acumulado en el volumen de exportación también se redujo en este lapso en un 22,5 %, pasando de 607.509 quintales oro-uva en el ciclo pasado a 471.093 en la actualidad, una caída de 136.416 quintales.
El precio promedio del quintal exportado también ha sido inferior, pasando de 235,49 dólares a 226,51, lo que representa una baja de 8,98 dólares, equivalentes al 3,81 %.
En la cosecha actual se han generado unos 44.666 empleos en el sector cafetalero, frente a los 43.928 del ciclo anterior.
Al cierre del ciclo 2022-2023, los ingresos por la exportación del café de El Salvador cayeron un 13,2 %, mientras que la producción y el empleo también registraron bajas del 4,84 % y 4,83 %, respectivamente.
La caficultura salvadoreña se ha visto golpeada por el hongo de la roya y la crisis climática, que la ha llevado a registrar, desde el ciclo 2013-2014, sus mínimos históricos de producción del grano.
En el ciclo actual la cosecha se ha situado en 893.326 quintales oro-uva, un 1,8 % más que lo recolectado en el mismo lapso en la cosecha 2022-2023, que fue de 877.750 quintales, lejos de los más de 4,3 millones de quintales que el país llegó a cosechar en el periodo 1992-1993.
El café es el principal producto agrícola de exportación de este país centroamericano, reconocido por sus variedades de especialidad cosechadas en seis zonas cafetaleras.
Este grano fue el principal motor de la economía salvadoreña en las décadas de 1920 y 1930, representando un asombroso 90 % de las exportaciones.
Pero el conflicto armado interno (1980-1992) afectó a la producción de café en todo el país y entre 1979 y 1986, en un periodo de solo siete años, la producción de café cayó en un 19 %.