"Entre los objetivos alcanzados se encuentra el lanzador utilizado para disparar contra (la ciudad de) Maalot-Tarshiha, en el norte de Israel ayer", detalló un comunicado castrense, en referencia a la andanada de 50 cohetes desde el Líbano que mató a un hombre.
Según el Ejército, los cazas realizaron incursiones limitadas y localizadas en el sur de Líbano, donde localizaron grandes cantidades de armas y desmantelaron túneles y lanzacohetes, además de matar a supuesto milicianos.
Además, desde la medianoche Israel ha detectado el lanzamiento de seis drones contra su territorio, uno de los cuales impactó una instalación de defensa en la ciudad norteña de Nahariya, mientras que el resto fueron interceptados, según un comunicado castrense.
A su vez, sobras las 6:00 de la mañana el lanzamiento de un misil tierra-tierra desde el Líbano activó las sirenas en la Galilea y otras áreas próximas, si bien el proyectil se desintegró en el aire sin causar peligro, según el Ejército.
Desde el estallido del conflicto entre Israel y Hizbulá hace más de un año han muerto cerca de 3.000 personas en el Líbano, la mayoría de ellas a partir del 23 de septiembre, cuando el Ejército israelí inició una campaña de bombardeos sin precedentes especialmente en el sur, el este y los suburbios meridionales de Beirut.
En el asediado norte de Yabalia, en el norte de Gaza, el Ejército aseguró haber eliminado a decenas de milicianos en "ataques aéreos y en enfrentamientos cuerpo a cuerpo". Aquí, la población que aún no se ha desplazado forzosamente a la ciudad de Gaza sufre falta de alimento y un sistema sanitario colapsado.
En el sur, de madrugada, Israel volvió a bombardear la zona humanitaria de Jan Yunis, donde sobreviven numerosos desplazados, en unos ataques contra sus tiendas de campaña que causaron numerosos muertos y heridos entre la población civil, según fuentes palestinas.
La agencia palestina Wafa añadió que el Ejército israelí también atacó un enclave de desplazados en la ciudad de Deir al-Balah, en el centro de la Franja de Gaza, donde ya se superan los más de 43.000 muertos, en su mayoría mujeres y niños.