"Sin duda, las elecciones han sido libres y democráticas", dijo Orbán en rueda de prensa conjunta con su homólogo georgiano, Irakli Kobajidze.
Orbán, que fue recibido anoche con abucheos de la oposición a su llegada al hotel en Tiflis, ya fue el primero en felicitar por su victoria el sábado a Sueño Georgiano, que aboga por normalizar las relaciones con Rusia.
Al igual que cuando se reunió en julio pasado en Moscú con el jefe del Kremlin, Vladímir Putin, Bruselas subrayó que la visita de Orbán a Georgia es exclusivamente bilateral y no representa al bloque europeo.
Ni caso a Bruselas
Orbán, que departió durante hora y media con Kobajidze, destacó que los observadores enviados por su país para supervisar los comicios confirmaron su limpieza y el hecho de que fueron "democráticos".
Además, recomendó a su colega que no se tome en serio las críticas de Bruselas, ya que -adujo- "es algo normal cuando no ganan los liberales, sino los conservadores".
"La política europea se basa en que si ganan los liberales es democrático y si ganan los conservadores, no lo es", dijo.
Orbán ya aseguró en X a su llegada a Tiflis que el país caucásico no necesita "sermones inútiles" de la UE.
"Les felicito por la celebración de unas elecciones democráticas y por la victoria. Confío en el desarrollo de nuestra asociación estratégica. Ustedes serán con seguridad miembros de la UE", afirmó.
Con respecto a las acusaciones de que Sueño Georgiano es una formación prorrusa, subrayó que "en la Constitución de Georgia está escrito que todos los Gobiernos del país deben trabajar en pos del ingreso en la UE. El partido gobernante apoya la integración europea".
Precisamente, Kobajidze agradeció a Orbán su apoyo y proclamó que "la integración europea es una importantísima prioridad para el Gobierno de Georgia"
"Nos unen principios comunes de defensa de los intereses nacionales, la identidad y los valores cristianos", aseveró.
No a una segunda Ucrania
El dirigente centroeuropeo -al que sus detractores echaron en cara que en 2012 había apoyado al entonces presidente georgiano, Mijaíl Saakashvili, en su enfrentamiento con Sueño Georgiano- insistió en que "el pueblo georgiano hizo una elección europea y también eligió la paz".
"Nosotros comprendemos esta elección, ya que nadie quiere verse implicado en una guerra sin sentido. Nosotros apoyamos a Ucrania, pero sabemos lo que es la guerra. Tiene lugar en nuestra vecindad y entendemos la importancia de la paz", señaló
Orbán, cuya llegada a Tiflis coincidió con la protesta opositora contra el fraude electoral, alabó a las autoridades georgianas por no permitir que el país "se convierta en una segunda Ucrania".
La presidenta georgiana, Salomé Zurabishvili, denunció el lunes en el mitin de protesta convocado frente al Parlamento que las elecciones parlamentarias del pasado sábado fueron "robadas" y prometió el retorno de la nación caucásica "al camino europeo".
"No perdimos las elecciones, nos robaron los votos, nos robaron el futuro", declaró.
La UE, que congeló las negociaciones de ingreso con Georgia tras la aprobación de leyes consideradas prorrusas, ha llamado a las autoridades locales a investigar las presuntas "irregularidades" detectadas durante la votación y el escrutinio.
Recuento parcial y críticas del Kremlin
La Comisión Electoral Central (CEC) de Georgia anunció hoy que efectuará un recuento de los sufragios en cinco colegios de cada una de las 73 circunscripciones electorales del país.
Una portavoz de la CEC explicó a EFE que el recuento no está vinculado a las denuncias de fraude de la oposición, sino que obedece a una innovación a ley de elecciones que entró en vigor en 2021 para aumentar la credibilidad de los resultados electorales.
Mientras, el Kremlin demandó hoy a la UE y EEUU a que dejen de presentar ultimátum a los dirigentes georgianos.
"Esto, por supuesto, son manifestaciones absolutamente repugnantes que se contradicen con las normas de las relaciones entre Estados que deben cesar", dijo Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, en su rueda de prensa telefónica diaria.
Aunque la oposición denunció injerencias rusas, Peskov subrayó que "en las elecciones ganó aquel al que los ciudadanos de Georgia le otorgaron el voto. Nosotros no tenemos derecho ni deseos ni intención de interferir en los asuntos internos de Georgia
"Nunca lo hemos hecho", afirmó.