Acompañada por el ministro de Cultura español, Ernest Urtasun, la reina Letizia recorrió la exposición guiada por la propia artista, que ha reinterpretado la serie de los 'Disparates', de Francisco de Goya, en una veintena de grandes cuadros y esculturas que se exponen hasta enero de 2025 en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, en Madrid.
La muestra ofrece la oportunidad de comparar la obra de dos artistas -Goya y Cabellut- que han analizado el alma humana para descubrir, con 200 años de diferencia, los mismos impulsos violentos, de maltrato a la mujer, envidias y mezquindades, y las tensiones que nos definen como sociedad.
“Pero los dos hablan también de lo importante que es buscar la bondad en el ser humano; los dos hablan con un punto de esperanza”, dijo el comisario de la muestra, Eloy Martínez de la Pera, que detalló que la exposición concluye con un cuadro blanco que refleja la esperanza de la artista en el ser humano.
Cabellut explicó que, por una serie de casualidades, llegó a sus manos una carpeta con los grabados de Goya y que, tras convivir con ellos en su estudio, comprendió que debía asumir el reto de reinterpretar las obras más potentes e incomprendidas del pintor de español.
“Siento los 'Disparates' como las creaciones más primitivistas, disruptivas, crípticas y radicales de la obra de Goya, pero al mismo tiempo las entiendo como las narraciones más contemporáneas y las que mejor reflejan las carencias de la sociedad actual”, aseguró la artista.
Según Cabellut, trabajar sobre la obra de Goya le ha enseñado que “los negros no son negros y los blancos tienen matices y profundidades”, una enseñanza que aplica tanto para el alma humana como para sus pinturas.
"Enfrentarme a los 'Disparates' de Goya me ha transformado como mujer, como artista y como persona", explicó la artista, que se ha planteado las mismas tensiones y preguntas que Goya hizo en su tiempo: la brutalidad, el egoísmo, la ignorancia y la deshumanización.
A través de este diálogo entre épocas, Francisco de Goya y Lita Cabellut ofrecen "una mirada sincera y penetrante a las sombras del alma humana", pero también muestran "que, incluso en medio del caos y la violencia, siempre existe la posibilidad de redención”, aseguró el comisario de la muestra.
Para Martínez de la Pera, ésta es “una exposición imprescindible para todos aquellos que buscan no solo admirar el arte, sino también entender su poder transformador”.