Así lo expresó en la reunión mantenida en Nuakchott con el presidente del país, Mohamed Cheikh El Ghazouani, y el ministro de Defensa en sendos encuentros en los que refrendó los compromisos en el ámbito de Defensa, incluidos en la declaración conjunta firmada el pasado agosto por ambos países.
Según informó el ministerio que dirige Robles, la situación geopolítica internacional, junto a la gravedad de las amenazas transfronterizas en ciertas zonas de mundo, plantean desafíos que requieren de una responsabilidad colectiva y de cooperación entre países para alcanzar la paz y trabajar por la seguridad.
Es el caso de España y Mauritania, país al que Robles calificó de "actor esencial" para avanzar en la paz y la defensa de los valores democráticos en el Sahel, "donde la situación es preocupante".
"España y Mauritania reiteramos nuestro compromiso con un orden internacional más justo y la protección de los derechos humanos, así como en el fortalecimiento de las relaciones entre ambos países para mejorar las capacidades militares y de formación específica", señaló Robles.
Por su parte, el ministro de Defensa mauritano, Hanana Ould Sidi, destacó que la paz solo puede ser un objetivo conjunto basado en dos ejes: disponer de capacidades y formación y la solidaridad entre países.
En este sentido, la ministra española destacó la colaboración del español Centro Superior de Estudios de la Defensa (Ceseden) y el Colegio de Defensa G-5 Sahel de Nuakchott, las actividades de seguridad cooperativa enfocadas a la formación de unidades o la garantía de seguridad en instalaciones militares, sin olvidar el despliegue de Fuerzas Armadas españolas en el golfo de Guinea, desde 2010, en labores de vigilancia y estabilidad.
Robles se reunió también con el presidente del país, Mohamed Cheikh El Ghazouani, que puso en valor el trabajo conjunto con España en la región del Sahel, "que contribuye a la estabilidad a través del diálogo de defensa".