"El mundo debe parar la limpieza étnica en el norte de Gaza", titula la oenegé un comunicado difundido hoy en el que subraya que "la magnitud de los crímenes que Israel está cometiendo actualmente en el norte de la Franja de Gaza en su campaña para vaciarla de los pocos residentes que quedan es imposible de describir".
La conocida oenegé israelí sostiene que la "incesante" ofensiva, además de provocar hambruna a miles de personas y de privar a los enfermos de atención médica, hasta niveles que "desafían la comprensión", ha asilado el norte de Gaza del mundo.
"Desde que comenzó la actual operación de Israel en el norte de la Franja de Gaza el 5 de octubre, la zona estuvo bajo un asedio casi total, golpeada implacablemente por los militares", dice la nota, que apunta que solo en los "casos más excepcionales", Israel ha permitido la entrada de ayuda humanitaria.
B'Tselem asegura que "los pocos testimonios que han llegado del norte de Gaza describen cadáveres alineados en las calles, hambre, falta de agua potable y civiles muertos, cuando las bombas caen sobre sus casas sin previo aviso o cuando huyen para salvar sus vidas".
La organización pone el acento en que "está más claro que nunca que Israel pretende desplazar por la fuerza a los residentes del norte de Gaza cometiendo algunos de los crímenes más graves según las leyes de la guerra", por lo que "las naciones del mundo deben actuar".
"Si la comunidad internacional no actúa de forma inmediata y decisiva, si no utiliza todas las herramientas disponibles (políticas, jurídicas y económicas), las matanzas en masa en el norte de la Franja de Gaza continuarán y el sufrimiento de sus civiles asediados aumentará. Todos los organismos e instituciones internacionales deben actuar ahora para obligar a Israel a que detenga la guerra y ponga fin a la carnicería", concluye el comunicado.
El asedio militar y los bombardeos israelíes contra el norte de la Franja de Gaza ya han causado más de 700 muertos, según las cifras de Hamás.