"Tenemos que continuar aplicando presión sobre Hizbulá y hacer daño adicional y continuo al enemigo, sin concesiones y sin darle respiro a la organización", indicó el jefe del Estado Mayor del Ejército de Israel, Herzi Halevi, en unas declaraciones difundidas por las fuerzas armadas israelíes.
La declaración se produjo después de los bombardeos del sábado y de ataques en la noche del viernes contra lo que el Ejército identificó como "almacenes de armas, puestos de mando e infraestructuras terroristas adicionales", y en los que fue alcanzada la mezquita aledaña al hospital Salah Ghandour de Bint Jbeil, a unos cinco kilómetros de la frontera.
"El centro de mando era utilizado por los terroristas de Hizbulá para planear y ejecutar atentados contra las tropas del Ejército y el Estado de Israel", alegaron las fuerzas armadas israelíes en un comunicado.
El Ejército israelí, que de nuevo emitió el sábado una orden de evacuación de las localidades del sur del Líbano, dijo que notificó a los residentes y mantuvo contactos con figuras importantes de varias localidades para identificar que Hizbulá estaba utilizando hospitales para trabajar.
El Ministerio de Salud Pública informó hoy de que al menos 25 personas murieron y otras 127 resultaron heridas en la campaña de ataques israelíes contra pueblos y aldeas de Nabatieh (sur), Bekaa (este), Baalbek-Hermel (noreste), Monte Líbano (centro) y la capital Beirut.
Por otra parte, Israel anunció la muerte de dos altos responsables de Hamás en dos ataques distintos, uno de ellos en Tripoli, el primero de las fuerzas hebreas contra esta ciudad de mayoría suní desde la guerra de 2006.
Los muertos son Muhammad Hussein Ali al Mahmud, parte de la autoridad ejecutiva de Hamás en el país levantino, en un ataque del que no trascendió más información; y Said Alaa Naif Ali, alto cargo de las brigadas Al Qasam, en el bombardeo de Tripoli en el que murieron también tres de sus familiares.
Por su parte, Hizbulá aseguró que durante la madrugada respondió a un "intento de avance" de las tropas israelíes en la localidad de Oddaisseh en la frontera sur del Líbano, donde horas antes ya había informado de otro intento de infiltración repelido con un ataque que provocó "una explosión masiva" provocando, dijo la milicia, bajas entre sus filas.
También informó de un ataque contra un tanque con un misil guiado en territorio libanés causando "muertos y heridos" entre los ocupantes.
Durante el sábado, Hizbula volvió a lanzar decenas de cohetes contra el norte de Israel, donde las alarmas no dejaron de sonar en todo el día.
Una de las ciudades golpeadas fue Deir al Asad, a unos 20 kilómetros de la frontera norte de Israel, provocando tres heridos leves, según recogió el diario The Times of Israel.
Desde el comienzo de las hostilidades, los ataques de Israel en el sur, el valle de la Becá y la capital, Beirut, han matado a casi 2.000 personas y han obligado a 1,2 millones a abandonar sus hogares, principalmente en el sur y el este del país mediterráneo.
Kurilla llega a Israel en medio de la tensión con Irán
El jefe del Comando Central de Estados Unidos, el general Michael Erik Kurilla, llegó este sábado a Israel para participar en la coordinación de la respuesta del Estado hebreo al ataque iraní del martes, una visita que se produce en momentos en que Israel prepara una respuesta "seria y significativa" al ataque masivo con misiles de la república islámica.
El pasado martes, 180 misiles balísticos lanzados por Irán llegaron a Israel en un ataque masivo que hizo sonar las sirenas antiaéreas en todo el país y obligaron a millones de personas a buscar refugio en cuestión de minutos, y que dejó una víctima mortal.
El ministro de Petróleo de Irán, Mohsen Paknejad, aseguró este sábado que no está preocupado ante un posible bombardeo israelí contra las instalaciones petroleras del país en represalia por el ataque con misiles de Irán contra Israel el martes.
“No nos preocupan las crisis que están creando los enemigos de la revolución”, afirmó Paknejad en declaraciones a los periodistas en una visita a la ciudad de Asaluye, en la sureña provincia de Bushehr, donde se encuentran gran parte de las refinerías y complejos petroleoquímicos del país, según informó la agencia Shana.
Siguiendo su visita al Líbano el viernes, el ministro de Exteriores de Irán, Abás Araqchí, se reunió el sábado con el presidente sirio, Bachar al Asad, en Damasco para abordar cómo "detener la agresión israelí" y "la importancia de brindar apoyo y asistencia a los hermanos libaneses a la luz del gran desplazamiento causado por la agresión israelí", según un comunicado de la Presidencia siria.