Las inundaciones, que comenzaron a comienzos de semana a causa de la tropical Yagi, también han causado daños en más de 65.000 viviendas y 375 escuelas debido a la crecida de los ríos por las fuertes lluvias, según las cifras hasta el viernes recopiladas por el diario oficialista ‘Global New Light of Myanmar’.
Las zonas más afectadas se encuentran en las áreas de Naipyidó y Mandalay, en la región central-norte, así como en Shan (noreste), Bago (centro), Kayah (este), Kayin (sureste) y Mon (sureste). El Departamento de Gestión de Desastres indicó que hay 187 campos que acogen a más de 236.000 desplazados en estas siete regiones.
Es difícil saber el número exacto de víctimas y afectados debido a la irregularidad con que las autoridades publican cifras totales y que hay zonas de difícil acceso y gran parte del país se encuentra sumido en un conflicto armado. La junta militar lanzó ayer un raro llamado de ayuda internacional en el ‘Global New Light of Myanmar’ para pedir donaciones dentro y fuera de Birmania para lo que ofreció diferentes cuentas bancarias.
Al impacto del Yagi, procedente del mar de China Meridional, se ha sumado las lluvias monzónicas procedentes de la bahía de Bengala.
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