"Debido a una falla en la barra de la subestación Molino, la cual está conectad a la generación de Paute, se ha producido un corte en el suministro de energía eléctrica en algunas provincias del país", señaló el Cenace en un comunicado.
El operador estatal estimó que la reparación del daño tardará entre tres y cuatro horas, y dijo que técnicos del Cenace trabajan con especialistas de las empresas de distribución para superar el desperfecto de forma paulatina.
Paute, con unos 1.000 megavatios de potencia instalada es una de las plantas hidroeléctricas más importantes del país y está emplazada en el sur andino, en un complejo que incluyen otras tres centrales de menor capacidad que aportan en conjunto hasta unos 1.700 megavatios.
Según reportes de medios locales el apagón alcanzó escala nacional y se ha acentuado en provincias como las andinas de Imbabura, Pichincha, Chimborazo, Carchi, Loja, Cotopaxi, Tungurahua y Azuay, las costeras de Guayas, El Oro, Manabí, Los Ríos y Esmeraldas, y la amazónica de Sucumbíos.
El corte del suministro eléctrico sorprendió a los ecuatorianos que en abril pasado soportaron apagones programados de entre dos y trece horas diarias por zonas establecidas, debido a factores como la sequía o las abundantes lluvias que habían afectado aleatoriamente el funcionamiento de las principalmente centrales hidroeléctricas.
La planta Coca-Codo-Sinclaire, la más importante con una capacidad instalada de 1.500 megavatios, también fue afectada en abril pasado por los fuertes aguaceros y la gran sedimentación consecuente, que puso en peligro el sistema, según advirtieron entonces las autoridades.
En Quito, el apagón de este sábado provocó un caos en el tráfico y en las actividades productivas que se vieron suspendidas de forma abrupta.
Semáforos apagados, colisiones, congestión de vehículos y peleas entre los conductores fueron frecuentes en la ciudad.