La jornada tuvo un nivel de actividad medio, con operaciones valoradas en 3.420 millones de euros, y al finalizar el selectivo se ubicó en los 7.431,96 puntos.
El CAC-40 había empezado el día ya en terreno negativo, perdiendo el umbral de los 7.500 puntos, y ni la momentánea buena recepción del anuncio de Barnier como nuevo primer ministro francés logró revertir la tendencia general negativa, que empeoró en la recta final de la sesión.
A nivel de los valores, 23 compañías cerraron al alza y 17 lo hicieron a la baja.
Las pérdidas más notables fueron para la empresa del sector del lujo Hermès (-6,42 %), aquejada aún de los signos de ralentización de la economía china constatados la víspera, la firma de programas informáticos Dassault Systèmes (-4,17 %) y el conglomerado también del lujo LVMH (-3,64 %).
Las subidas más significativas se las anotaron la inmobiliaria Unibail-Rodamco-Westfield (2,76 %) y los bancos BNP Paribas (2,73 %) y Société Générale (2,42 %).